El calzado de seguridad.
La importancia del calzado en general y en concreto la del calzado de seguridad debe ser máxima para quien lo lleva y para los demás pues podemos crear daños colaterales o derivados debido al uso incorrecto o inapropiado de aquella prenda que nos une al suelo y a la vida en consecuencia.
¿Por qué es realmente importante el calzado de seguridad?
Todos deberíamos saber ya a estas alturas que el calzado nos protege los pies de muy diversas agresiones que encontramos en nuestro periplo diario como cristales, chinchetas, puntas…también de las bajas y altas temperaturas y todo esto se enfatiza cuando hablamos, como es el caso en concreto, de un entorno laboral que puede ser de muy distinta índole, siendo así entonces los distintos tipos de agresiones y peligros que acechan disfrazados, en muchos casos, de «accidentes» cuando son solamente riesgos que podríamos haber evitado.
Estructura del calzado de seguridad.
Como podemos observar en la imagen el cada parte del calzado tiene un nombre y unas características adaptadas con la finalidad de proteger, evitar o minimizar el riesgo laboral.
Con puntera de seguridad, con suela antideslizante, impermeables, flexibles, ligeras…son algunas de las cualidades que debe tener el calzado de seguridad.
¿Qué nos dice la norma ISO 20345 europea?
En ella se recoge la clasificación específica del calzado de seguridad distinguiendo entre dos tipos generales:
- (I) para calzado hecho con empeine de cuero y otros materiales.
- (II) para calzado hecho con caucho y similares materiales.
Encontramos subdivisiones con nomenclaturas literales y numéricas dependiendo del tipo de protección que nos ofrezcan (térmica, eléctrica, química o mecánica) así por ejemplo P significa que es resistente a la perforación y C que es calzado para conductores.
Las demás letras son específicas dependiendo de sus características protectoras o preventivas (A, HI, CI, ED, WR, M, AN, WRU, CR, HRO, FO, SRC) y también se combinan las características según la necesidad de prevención y el entorno laboral.
Si te interesa puedes consultar la norma íntegra en este enlace
La seguridad aplicada al caso concreto.
Jardineros, bomberos, policías, trabajadores de la construcción, carpinteros, mecánicos y en definitiva cualquier trabajador que se encuentre en el desarrollo de su labor rodeado de un entorno laboral que implique riesgos laborales deberá calzar esta importantísima prenda protectora.
Toda información al respecto, más detallada, podemos buscarla en la Guía de Prevención de Riesgos Laborales (sindicatos recientemente han reelaborado una) y por supuesto en nuestra web PREVECOEX donde además encontrarán un completo repertorio de posibilidades y características preventivas adaptadas al medio donde se desarrollará la actividad laboral.
En definitiva, uno se viste por los pies y efectivamente, es lo primero que debemos adaptar a nuestra vida laboral, la mayor de las seguridades y confort para trabajar bien, prevenir y proteger nuestros, muchas veces, minusvalorados pies.
